10.30.2008

¿Por qué tomar pastillas? Un argumento en dos actos.


Primer acto (con Pastilla)

Narrador: Días uno a veintiseis
(silencio)

Narrador: Día veintisiete

Sister: Oye, Andrés, se que vendrás por ahí de mañana, así que tengo ya todo preparado. Es más, sacaré algunos implementos para llevarlos conmigo por si llegas antes de la comida. Y, empezaré la nueva Pastilla el Domingo, así que espero que puedas retirarte el Lunes al mediodía. ¿Algo más que necesites?

Andrés: No, eso sería todo. No puedo creer que me engañaste con ese falso embarazo químico otra vez..., bien ahí eh, Sister.. Un placer visitarte.

Sister: Sale pues.

Segundo Acto (sin Pastilla)

Narrador: Día dos

Andrés: Yeeeahhhhhh!!!! ¡Por fin libre de ataduras químicas! Haré una fiesta en tu útero como si fuera el fin del mundo.

Sister: ¿Por qué estoy llorando y riéndome al mismo tiempo?

Andrés: Jajajajaaaaaaa!!! No te acostumbres mucho ehhhh????

Narrador: Día quince

Andrés: Huoola! Nomás pasé a visitarte un ratillo. Como que se me fue la onda. ¿No debería estar aquí, o si?

Sister: No. Es día quince.

Andrés: Ups. Lo siento tanto. Olvida que vine. Perdón por el desmadre. 

Narrador: Día veintiuno

Andrés (vía colicófono): ¿Quiubo? Nomás hablaba para decirte que ya voy. No se exactamente cuándo, pero creo que dejaré el colicófono descolgado para que estemos comunicados. Cólicos. Enjoy!

Narrador: Día veintiseis

Sister: ¿Andrés? ¿Oye? Esteee... como que te espero en el próximo par de días. ¿Te espero en la mañana como siempre?.... ¿Heey???

Narrador: Día veintiocho

Sister: ¡Oye! Se que estás ahí. El colicófono sigue sonando. ¿Oyee??

Narrador: Día treinta y seis

Sister: Ok. Ahora me debes ochenta varos por la pinche prueba de embarazo que tuve qué comprar. 

Narrador: Día treinta y nueve

Andrés: Ya. Ya. Ya llegué.

Sister: Estoy a media cena.

Andrés: Sí, y cuando te levantes, te darás cuenta que llegué cuando saliste de tu casa. 

Sister: Hijo de puta. Traigo mis calzones bonitos.

Andrés: Híjole. Sí. Ni modoooos.

Sister: Te voy a poner un pinche tapón, carajo.

Andrés: Saaaale. Y luego vas a querer hacer cositas pero naaaaaaa. No vas a poder. ¿Tenías esperanzas de que algo pasara, verdad? Jajaja... No te va a funcionar un tapón. Ne-ce-si-tas otra cosa. ¿nada más traes uno? Awwwwww.. Qué ternuritaaaa. Vele diciendo que te quieres ir a tu casa... 
(silencio)
Ah! Y bueno....  voy a estar aquí un rato.. Igual una semanita o semanita y media. 



1 comment:

Anonymous said...

ja, y yo que me llevo de a re-piquete con el andy, tanto, que hasta se pasa una semana conmigo./ Es el visitante incómodo que te encanta estar invitando, al menos a mi...como cuando procuras estar cerca de alguien o hacer algo que va en contra de todo lo que eres, pero para purgar algún peso de consciencia ahí estás, no te quitas..... o probable (y simplemente) es mi lado pyscho killer que se regodea al ver el desastre de sangre. No todos los días puedes ver tanta, y menos la tuya.