2.26.2009

Se ha ido...

Bambucito se ha ido a la oficina.
Así como mis vacaciones, mis esfuerzos, mi humor, mis ganas, mis desvelos y mis desmañanadas. 
Lo puse en la esquinita. Y ahí está, con su única ramita, en su macetita morada. Ojalá no se me seque. Tengo tanto que hacer que igual se me olvida regarlo. O se contagia de estrés y se muere. O extraña el vaporcito del baño y se seca. Como una metáfora de mi estancia en esa oficina. 

1 comment:

Joaquin said...

O mai god, ésta me pegó en el corazoncito..